lunes, 31 de diciembre de 2012

Mordiscos

Me he superado, hoy he soñado que me daban caza. Me atravesaban las pantorrillas y no podía correr más, así que no me quedaba otra que defenderme. Empezaba a arañar y dar puñetazos a mis cazadoras (eran dos mujeres humanoides viejas y parecía que iban desnudas, o quizás es que el traje era carne. Lo que fueran, comían personas)

A una la conseguía levantar toda la piel del brazo izquierdo y la iba a morder, gritándole "púdrete, maldita zorra" y en el momento que le he dado el mordisco...

...me he mordido la mano a mí en la vida real

sábado, 29 de diciembre de 2012

Cámara subacuática (I)

Llevo "bastante" sin escribir, pero es que los estudios (bueno, y los eventos navideños) me absorben por completo. Este sueño va a ir a cachos, porque aunque es corto, hay muchos detalles para describir...

Esta noche soñé la historia de una familia que estaba vinculada, casi desde el principio de los tiempos, a proteger a otra familia. El hijo mayor de la primera familia (no voy a decir los apellidos porque 1º están en latín, y yo de eso no sé, y 2º parecerían sacados de una novela de harry potter) debía proteger a la hija más pequeña de la segunda familia, por no sé qué juramento de sangre. El caso es que la niña pequeña siempre se la acababan comiendo, personas o lobos (lo de personas ya era en una época muy muy lejana) o simplemente moría por accidente.

No me acuerdo que les pasaba a los primogénitos de la primera familia, pero no era nada bueno.

El problema surgía en una época más futurista, en la que ella era huérfana y no tenía ni idea de su maldición ni de que tenía que ser protegida y, que encima, era hija única. El hijo de la otra familia también era hijo único, por lo que de si ésta no sobrevivían, las familias morirían para siempre.

Él era, por lo menos, 11 años mayor que ella. Ella tenía 16 en el sueño (normalmente morían entre los 12 y 21 años)

Cuando él la encontraba, le decía que sabía cosas sobre su familia, intentaba raptarla, pero no lo conseguía.
Pero ella, picada por la curiosidad, iba siguiendo pistas. El orfanato donde vivía estaba en medio de un bosque, que daba a un acantilado.

Descubría partes metálicas y cámaras escondidas por el bosque y en zonas del orfanato, y allí empezaba a sospechar.

Un día,  vio la sombra del hombre que intentó secuestrarla entre los árboles, aunque no la miraba a ella, sino que simplemente caminaba hacia el acantilado.

Le siguió. El hombre bajó a la playa por un camino de escaleras de sal pegado al acantilado. Ella esperó a que estuviera ya en la zona de playa para comenzar a bajar las escaleras sigilosamente, pues no tenía donde esconderse si él se giraba.

Al llegar a la playa, vio como había destellos de colores de arcoiris en el agua. Era una plataforma. El hombre se puso sobre ella y colocó la mano encima de cada color, siguiendo un código de colores determinado. Entonces se comenzó a sumergir.

Una vez desaparecido entre las aguas del mar, ella corrió hacia la plataforma, intentó imitar el código de colores, y se puso nerviosa y al final puso la mano haciendo una circunferencia en el sentido de los colores del arcoiris.

No pasaba nada, creyó haberse equivocado.

Entonces el suelo bajo ella se abrió y cayó en un remolino de agua hacia la profundidad del mar, donde no llega ni la luz.

Esperó que algo sucediese, algo se abriese, una cámara, algo.

Y entonces se dio cuenta de que había cometido un gran error en el código de colores.
Asfixia, siempre había pensado que esa era la peor muerte que una persona puede sufrir, porque era lenta y llena de delirios y convulsiones. Hubiera preferido golpes o fuego, o que cuchillos o dientes afilados la desgarraran, así por lo menos habría perdido la consciencia rápidamente o se hubiera desangrado, y así por lo menos la muerte hubiera sido rápida

Y ahora iba a ahogarse en la más negra oscuridad... sin poder chillar ni pedir ayuda, pues dentro del agua nadie la puede oír, y sería malgastar el aire

[CONTINUARÁ...]


sábado, 22 de diciembre de 2012

Próximo Fin del Mundo para 2020

En la víspera del Fin del Mundo del 21 de 2012, o sea, hace un par de días, soñé que estábamos en una gala de cine, con mi padre, porque habíamos ganado unas entradas de pre-estreno y además una cena con los actores, director, cámaras, dobladores, y etc de la película.

La peli era americana, diría yo. No me acuerdo muy bien de qué iba. Lo que sí recuerdo es que me hice muy amiga de dos de los dobladores. Vivíamos en Alicante, cerca de la playa, aunque el estreno había sido en una ciudad Capital, no parecía Madrid, así que supongo que sería Valencia.

Dio la casualidad de que estos dos dobladores también estaban por allí. Uno  era alemán y estaba como en un proyecto tipo Erasmus, pero trabajando, el otro era español. El chico alemán medía casi 2 metros y tenía un corte de pelo estilo Kurt Cobain, la verdad es que se parecía bastante, pero con menos barba. Hicimos buenas migas. Yo vivía sola con mi hermana en un piso chiquitín de por ahí, cerca de la playa. Quizás era el piso cutre que tenemos en Campello, pero si lo era, estaba realmente muy reconstruido.
El otro doblador, venía a vernos a menudo, porque tenía un piso por ahí cerca. El rubio y alto era más complicado verle. Un día me invitó a cenar a su casa, en valencia. Tengo la imagen grabada de un brindis con vino, y conversaciones muy interesantes, pero no recuerdo que pasase nada más. No dormí casi porque me dejó dormir en el sillón y él durmió en el suelo porque empezamos a hablar y con la tontería nos quedamos así hasta el amanecer, charlando.

Volví al piso, y pasaron los días. Un día, vino mi familia de visita, salvo mi hermano mayor. También vinieron algunos compañeros españoles que habían colaborado en la película esa y dos americanos. Habíamos hehco todos muy  buenas migas. El chico de los dos metros no daba señales de vida. Estábamos comiendo en un telepizza, bromeando sobre el Fin del Mundo, según no sé qué teoría.  El que sacó el tema era el cineasta, que pensaba hacer una película basada en eso. Nosotros bromeábamos sobre que el Fin del Mundo había sido en 2012 y no iba a volver a ser y blablablá.

Acabábamos la cena y salíamos del telepizza. Uno de los que cenó con nosotros era dueño del local, también amigo nuestro.

Al salir, de repente, cayó algo de fuego en frente nuestra. El cielo estaba incendiado, literalmente. Era  como un continuo crepúsculo ardiendo. Nada más salir (yo iba delante) me giré y grité a todos que entrasen corriendo en el telepizza. En la calle cundía el pánico, un grupo de chicos jóvenes con pintas de emo venían corriendo a intentar cobijarse en el telepizza. Mi reacción era cerrar la puerta (que era de cristal)  con cerrojo spara que no pudieran entrar. Si había un holocausto zombie, mejor quedarnos dentro del telepizza que había provisiones para uno o dos meses con los que éramos, si entrase todo el mundo, ninguno sobreviviríamos. Y menos aún iba a dejar entrar a esa fauna artificial. También cerramos la puerta del piso de abajo.

Iban a acabar rompiendo las puertas, así que elaboramos un plan para abrirlas y salir corriendo y llegar a un sótano seguro, ya que el piso de abajo realmente era un piso a nivel normal del suelo. Salíamos evitando a la gente y nos separábamos para llegar a un sótano, mientras unos iban a por el coche (porque tenía cosas que podían usarse de armas) y otros corrían hacia el sótano.

Yo me desubicaba, me perdía al lado de una rotonda. Había caído una cosa ardiendo a mi lado y estaba un poco en estado de shock, el aire ardía. Miré al cielo y había algo parecido a un zeppelin-nave espacial-avión. Yo les chillaba algo a mi madre "es como cuando estuve en Londres". No entiendo el sentido de esa frase, en la realidad, pero en el sueño ya había vivido algo parecido a una guerra.

Seguían cayendo cosas ardientes de fuego y me di cuenta de que los soportales no iban a protegerme. Estaba sola, el resto habían corrido más. No me quedaba más que el azar y la suerte y correr en zig-zag mientras llovían metales ardientes. Comencé a rezar y a correr, con los ojos cerrados al principio y luego bien abiertos, cogiendo mucha velocidad, no podía parar aunque me doliesen las piernas. Encontraba a mi hermano por el camino y corríamos hacia el sótano, rezando juntos mientras corríamos.

Poco después despertaba.

La verdad ha sido un shock despertar así de golpe en el día del supuesto Fin del Mundo del 2012, pero bueno, al menos ha sido un sueño entretenido.

lunes, 17 de diciembre de 2012

Sueño de yonkis

Soñé que, un amigo, tras saber que había roto con mi novio, metía una caja de preservativos en mi armario, mi padre la pillaba y me caía una bronca, aunque bastante ligera comparada a lo que me esperaba.

Cuando le preguntaba a este amigo porqué había hecho esto, me daba motivos sin coherencia, decía que era una venganza por ponerle en evidencia hace unos fines de semana. ¿Evidencia? No, lo que pasó queda muy lejos de la vergüenza o la evidencia, porque simplemente cuando nos vimos no pasó nada anormal.

Estaba discutiendo con él,  en su casa, y su madre apareció y me invitó a cenar.

Por culpa de mi amigo, se me cayó el móvil al WC. Cuando cambié la tarjeta, descubrí que tenía varios mensajes y llamadas perdidas, pero el móvil que me dieron era tan malo y además medio táctil medio modelo antiguo, que no podía ni coger el teléfono. La mayoría de los mensajes eran de mis padres preguntando dónde estaba y las llamadas perdidas de mi ex-novio. Me  dio ansiedad el haber perdido esas llamadas y comencé a estrangular a mi amigo, él estaba tirado en el suelo y yo encima suya.

Él estaba drogado o algo así, pero consiguió quitarme de encima. Cuando su madre entraba en el cuarto para llamarnos a cenar, la escena parecía otra cosa, y decía algo tipo "vaya, me alegro de que os halláis reconciliado con tanta ilusión".

Una cosa que me llama mucho la atención del sueño es que mi amigo tenía una hermana pequeña , rubia, con los ojos azules, lo cual es imposible porque es hijo único y sus padres son muy mayores ya. La hermana pequeña tenía vitíligo, pero era tan rubia y de piel tan clarita que casi no se le notaba (se parecía más al padre). Llevaba 2 coletitas y tendría como unos meses la primera vez que me la encontraba en el sueño y la última vez que la vi tenía 2 años, mínimo.

Después de cenar, en un arrebato de ira, lanzaba el móvil contra una pared. Mi amigo venía y me ponía la mano sobre el hombro. Seguía como drogado. Se iba caminando por un camino campo a través y se le caía una bolsita de plástico con hierbas. No era marihuana, no sabía lo que era, pero desde luego me lo quedaba para poder vendérselo a alguien y comprarme un móvil decente.

Luego recuerdo llevar a un antigua compañera porrera en coche para que hablase con unos tipos sobre el valor que tenia esas hierbas. La jugada salía algo rara, porque nos acabábamos yendo de fiesta con sus amigos.

Poco después creí despertar. Normalmente cuando estoy para dormirme suelo pensar en que alguien me abraza y me protege, para dormirme tranquila. Empecé a pesar en eso, y de repente sentí mucho calor en el pecho, y luego una sombra que me empujaba hacia el interior de la cama, como si se hundiese. Ya no tenía miedo, porque me daba todo igual. Luego una sombra salía de mi cuerpo y comenzaba a empujar a la otra sombra hasta que la presión se relajaba lo suficiente y podía respirar con normalidad. Mientras todo esto sucedía, había una narradora, como en un documental, explicando todo lo que estaba sucediendo.

Poco después sonó el despertador. Creo que la medicación no está haciendo efecto como debiera, me deja cansada de día, pero de noche sigo soñando cosas raras.

domingo, 16 de diciembre de 2012

Fases de la ruptura: 5-Aceptación total y optimismo

Tengo sólo 18 años y un futuro prometedor.
Además, ahora tengo la posibilidad de ir donde quiera y cuando quiera sin deberle vínculos emocionales a nada ni a nadie.
Soy joven, y hay miles de historias esperándome por ahí.
Entrar en la universidad ha sido como comenzar de nuevo el instituto, las mismas reacciones, exactamente iguales, sólo que ahora voy con algo más de experiencia.
Ahora voy a estar sola por un tiempo, espero que hasta que termine la carrera, y en mi cabeza, sola es igual a libre.
Y como no tengo ningún otro vínculo con mi ex-novio (me sabe raro escribirlo) por el que verle, ya sabes, ojos que no ven, corazón que no siente.

Donde hay fuego siempre quedan cenizas, y esas poco a poco se las irá llevando el viento del tiempo. Calculo que dentro de 3 años o así dejaré de sentir cualquier tipo de emoción hacia él, salvo quizás una leve nostalgia, pero nostalgia de la buena, de la de "quiero recordarte así, porque recordarte como eres es malo".
Así que recordaré lo que nunca sucedió.

sábado, 15 de diciembre de 2012

Fases de una ruptura: 4- Esperanza (o Nostalgia II)

Y te acuerdas de otras muchas cosas que habéis pasado juntos y piensas "quizás si no hubiera ido allí ése día, le hubiera dado tiempo a volver a cambiar de opinión, total, lo que rápido se decide, rápido se deshace..."
Y continúas alienándote, empezando a hablarte a ti misma en segunda persona como ahora mismo, ¿lo ves?
Y sigues con la esperanza de "Es una mala racha y quizás cuando se dé cuenta de que es un error me hable y se resuelva" Total, ahora estaba pasando una mala racha con todo el mundo, no sólo conmigo.
Y no es por ser soberbia, pero soy lo mejor que va a tener en la vida. No va a encontrar a nadie tan desequilibrado mental como para poder mantener conversaciones interesantes como las mías.

Pero a la vez, una voz dentro de tu cabeza dice "Es mejor así. De todas formas era lo que querías, estar sola".

Es curioso, pero cuando estoy sola no me siento sola. Cuando estoy rodeada de gente, la mayoría de las veces, me siento muy sola.

También hay otra voz que dice "aunque reconozca su error, el orgullo no le permitirá volver a ti. Rehaz tu vida, por orgullo"

Pero, aunque admito que me he fijado y soñado y pensado en otros chicos cuando todavía estábamos juntos, ahora mismo, que estoy sola, quiero mantenerme sola. Y me repugna pensar en cualquier otro chico, porque una parte de mi conciencia sigue manteniendo la esperanza de que quizás, algún día, nadie sabe cómo, coincidamos por la calle, como cuando empezamos a salir. Pero siendo realista, nunca hemos tenido nada que nos una a parte de nuestra relación.

Y me da nostalgia y rabia el pensar que alguien que ha sido de los círculos más cercanos de mis órbitas ha salido despedido al vacío por inercia y que puede que nunca jamás le vuelva a ver, pues no tenemos nada que nos una, ni siquiera vivimos en la misma ciudad.

Pero la gente fluye, y después de toda la gente que he perdido, me voy acostumbrando.

Fases de la ruptura: 3-Rabia

Al fin siento algo.
Enfado.
Un ligero enfado.
Porque recuerdo lo que decía y le veo como un hipócrita.
Un día me dice que jamás me va a querer como a la anterior, otro día me dice que me ama (de corazón y le costó, no como esos "te amo" tontos  que sueltan las parejas tontas), y un par de días después dice que no confía en mí (no en el sentido de infidelidad, sino que no confía en "mis decisiones") y que me tiene que juzgar, y al siguiente dice que ya he sido juzgada y que he perdido.

Y dice que pensaba dejarme cuando acabaran los exámenes. Guay, encima dejarme cuando tengo todo el tiempo para él.

Realmente no tengo a nadie cerca a quien contarle como me siento. Lo poco que siento. No tengo ni de qué ni con quién desahogarme.


Nunca he celebrado San Valentín, ni cumplir un mes, ni un aniversario, nunca, con nadie (y no es porque no haya tenido otros novios que hayan durado un año también), y eso es lo que me da rabia. Teníamos tantas cosas por hacer y él me dejó hacer tan pocas...

Siento que he invertido mucho en esta relación para que al final fuera a la nada. Es como invertir en acciones y que bajen en picado.

Siento que he perdido mi tiempo, y eso es algo que ya nunca voy a recuperar. La vida es un proceso irreversible.  Y el tiempo es oro. Y perderlo realmente me da mucha rabia...

Y luego está el eco de la frase de "A mí me dieron muchas más oportunidades de las que yo te estoy dando a ti". Él no entiende lo que significa esa frase para mí. No creo que nadie en el mundo lo entienda.

Cuando le recuerdo decir eso le odio, con todas mis fuerzas. Ésa frase sí que me da rabia.


Fases de la ruptura: 2- Nostalgia

Y me acuerdo de los primeros días juntos y de lo tonto que era él y de lo pura que era yo. Me acuerdo que nada más empezar él tenía la idea de que íbamos a romper en algún momento.
Yo tenía la idea de que iba a ser en poco tiempo. La verdad es que me entró por los ojos y por la forma de hablar. Y por el morbo de salir con un desconocido, supongo. Nos conocíamos de dos días cuando empezamos.

Es raro, pero de todos los momentos que tuvimos que podrían ser destacados de la relación, yo recuerdo un jueves, cuando yo estaba todavía en 1º de bachillerato, que paseábamos por Alcorcón.

No sé porqué recuerdo ese momento de manera tan destacada. Quizás es, porque hasta ese día, yo no estaba enamorada. Y el volver a sentir que me enamoraba era una sensación agradable y estúpida, aunque nunca es como la primera vez. Mi enamoramiento duró muy poco, y entonces, empecé a quererle.


Cuando me dejó, sabía que me iba  a dejar ése día porque, suene extraño o no, soñé que iba a hacerlo. No íbamos a vernos, así que fui yo a verle. No creía que los sueños se cumpliesen, no este tipo de sueños. Cuando me besó para saludarme, casi me aparto. Me sentí incómoda, no sé porqué. Cuando me dio la mano, también. era como si no encajara, si ese día tenía que dejarme, que me diera la mano, me descolocaba bastante.

Parece que ha pasado mucho tiempo desde entonces, pero es que cuando estudio los tiempos se me hacen eternos. Y además el estudio de hoy no me ha cundido nada. No he sido capaz de estudiar ni 2 temas enteros.

Creo que es a medicación que me han mandado para dormir, que hace que me duerma en cada esquina.


Fases de la ruptura: 1-Alienación

Aunque sea una noticia que me espere, que se vea venir, siempre es lo mismo. Normalmente vivo mi vida en tercera persona, pero en una situación así lo poco de primera persona que me queda se esfuma.

Leo cosas sobre las fases de perder a un ser querido, tanto si se muere, como si un amigo se va lejos y no va a volver, como si rompo con mi pareja, y pienso... ¿por qué yo no siento eso?

Ahora, después de una relación de 1 año y medio y poco más... no sé. Sinceramente, cuando estábamos juntos no contábamos cuanto tiempo llevábamos, y ahora es un poco tarde para contar, porque es una cifra que se va a quedar estancada y olvidada para siempre.

Me veo cayendo en el infinito. Ahora todo da igual. Mi vida sigue normal, estudiando mucho y eso. Como quien juega a mover una marioneta, muevo mi cuerpo acorde a lo que corresponde.

A veces, pocas veces, cuando estaba con él me sentía dentro de mí, como si pudiera vivir en primera persona. A veces eso era agradable, otras no, porque implicaba manifestar sentimientos.

Me siento exactamente igual que cuando murió mi abuela. Tranquila, en paz. No derramé ni una lágrima. Pensé "está en un lugar mejor y yo sigo aquí", y eso no era un consuelo, era una realidad.

Ahora que he perdido a mi pareja, aunque no del mismo modo, simplemente ha salido de mi vida para siempre, pero al menos la suya continúa. No puedo decir "está en un lugar mejor", porque sé que no lo está, y eso es lo único que diferencia perder a alguien por muerte o porque simplemente se van, que unos van a un lugar mejor y los otros se quedan en la misma mierda (o maravilla, depende de por donde se mire)

Sinceramente, no siento nada. No en primera persona. No he derramado ni una lágrima. Ni siquiera siento un vacío. Me siento rara. Sola, de nuevo, y eso, en cierto modo, era lo que quería.

Da la impresión de que lo que me rodea es ficticio. Y no pienso en nada.
Todos esos filósofos o psicólogos que dicen que es imposible el pensar en nada se equivocan. Yo sí puedo.
No es muy complicado, sólo hay que actuar instintivamente y contestar en modo automático. Ni siquiera me entero de lo que me hablan.
No sé a qué zona del planeta ha ido mi yo, pero se ha alienado y está muy lejos.

Con tal de sentirme, desearía por lo menos poder sentir pena. Pero pena por lo que pasa, no esa pena egoísta que siento por mí porque no puedo sentir pena.

Quizás es por la medicación que me han dado para que duerma, quién sabe. La medicación me ha dejado físicamente hecha polvo. En efectos secundarios pone "depresión". Alienación es la depresión de lo que no pueden manifestar sus sentimientos.

viernes, 14 de diciembre de 2012

Gomaesponja

Objetos frágiles.
Gomaesponja no es uno de ellos.
Es blanda, en primer lugar, aún así impermeable.
Y se amolda a cualquier situación.
Cuesta mucho romperla, pero si se retuerce hasta el extremo, quizás se consiga hacer fisuras. Entonces deja de ser impermeable y acaba rompiéndose.

No soy una copa de cristal que simplemente se cae y se rompe. Soy más bien como los tapones para los oídos que están hechos de gomaesponja. Trato de evitar el sonido, ahora, las voces, también. Preparada para absorber golpes.

jueves, 13 de diciembre de 2012

21 de Diciembre de 1600

Estaba en un cuarto con dos camas, era una excursión o algo así. Eran 2 camas con una pequeña mesita con una lámpara de noche en una habitación en forma de L. Las camas estaban cerca de la puerta, colocadas con la cabecera hacia el lado opuesto de la cama. Había una estantería que nos impedía ver toda la sala.

Resultó que mi compañero de habitación, casualmente asignado, era mi novio. Era una suerte.

No había calefacción, así que por la noche, yo dormía en la cama más cercana a la puerta y él en la de al lado, pero yo tiritaba. Las mantas eran muy finas y realmente pasábamos frío. Así que acabó metido en mi cama, como no.

Y bueno, una cosa lleva a otra, no voy a dar detalles de lo que pasaba después. No dormíamos en toda la noche.

Cuando llegaba el amanecer estábamos en un estado entre el sueño y la vigilia, delirando un poco bastante.

Entraba su padre en la habitación y empezaban a hablar en su idioma, yo no entendía nada. Parecía que le estaba regañando, al parecer se había pasado de las 9. Su padre se iba  y poco después él se levantaba a buscar algo, o a ir a la ducha, no sé.

Recuerdo que había mucha sangre por el suelo, mía probablemente, y me regañaban por ello.

Al levantarme, las sábanas se me pegaban a la ropa y se formaba un vestido. En la otra zona de la L del cuarto había una ducha y un baño, mi novio estaba duchándose. Le llamaba y hablábamos de algo que no recuerdo.

Al volver, recogía la sangre y veía que había una chica sobre mi cama. Estaba de rodillas mirando la pared y escribiendo en ella. Hablaba rapidísimo. Llevaba capucha y parecía drogada.

Hablaba de un juego que decía que solía jugar conmigo, en el cual las personas decía una fecha o un suceso y los jugadores adivinaban el suceso o la fecha correspondiente. Vale, sé que parece un examen de historia, o una pregunta de trivial tal cual, pero el caso es que solíamos jugar a acertar sucesos que iban a pasar.

Ella hablaba de que había apostado porque no sé qué iba a pasar en 2020 o 2016, pero que no estaba muy segura.

Y me decía (tenía ojos de loca, totalmente) de repente, cambiando totalmente de tema: "¿SABES QUÉ VA A PASAR ESTE 21 DE DICIEMBRE? LO MISMO QUE EL 21 DE DICIEMBRE DE MIL SEISCIENTOS... MIL SEISCIENTOS... Mmmm... no me acuerdo, mil seiscientos dos... o era seis... ¡¡NO ME ACUERDO!!"

Entonces sonaba el despertador. No tengo ni idea de lo que sucederá este 21 de Diciembre. El  Fin del Mundo, desde luego, no.

Va un barco al muelle y rebota

En las vísperas del examen de biofísica tuve este mal sueño:

El examen de física era el viernes junto con el de biología.

El examen es puramente termoquímica, pero en el sueño eran todo fuerzas, y no conocía más que la definición de la tensión superficial.  Todos se iban al aula magna, pero como no cabíamos todos me llevaban a mí sola a un laboratorio. Tenía dudas, estaba sola, eran 5 ejercicios y no entendía ningún enunciado.

El primero iba de un barco que llegaba a un muelle y rebotaba con unos datos determinados. Teníamos que hallar la fuerza con la que rebotaba el barco. Me iba, no recuerdo a donde.

Tenía toda la mañana para hacer ese examen y el de biología. Me traían el examen de biología, y era tipo test, y todo era sobre algas, peces y pesca, pero estaba en un vocabulario tan tradicional que lo desconocía.

Era frustrante, no comprendía nada, me agobiaba y no conseguía hacer nada. Al final del día entregaba solo un ejercicio con una respuesta que eran 730 dinas y un  test hecho a boleo.

domingo, 9 de diciembre de 2012

O podría volver a aparecer yo

Pensaba que estaba totalmente despierta. Estaba pensando, entre otras cosas, en dormir boca arriba de nuevo. Me daba algo de cosa porque mis episodios de parálisis suelen suceder más si estoy boca arriba (y muy estirada, la verdad es que me despierto en una posición que parece que estoy haciendo estiramientos). Pensé que ya lo tenía más que superado, y por ello estaba en la posición perfecta, y pensé...

"¿Qué es lo peor que podría pasar? Podría quedarme dormida..."

"O podría volver a aparecer yo" - entonces apareció una sombra, una sombra que conozco muy bien. Era solo una silueta, como siempre, como en un sueño que tuve hace un año, el mismo, había vuelto. Su voz sonaba ligeramente más grave de lo que es en persona, pero era amable. Su voz no era hablada, sonaba en mi cabeza. "Será mejor que duermas de lado"

"Sí, será mejor" y me giré, e imaginé que él estaba allí, para velar por mí el resto de la noche, intentando imaginar que no se iría de nuevo, como hace siempre. A veces viene a hacerme llorar, no sé muy bien porqué lloro, si porque venga él a verme o porque se tenga que marchar.
Le vi hace poco, en la vida real. Y no tiene nada que ver con el sueño.
Es el amigo imaginario perfecto,y digo imaginario pese a que es una persona real, porque en la realidad ya me jodió bastante. Creo que en algún lugar de mi mente quedó idealizada su silueta para protagonizar la mayoría de mis sueños cada vez que me siento sola.

Y es que últimamente me siento muy sola

Y si no he escrito en estos días no es porque no haya soñado, es porque he estado tan deprimida, liada y estresada que no tenía tiempo de nada, salvo de estudiar física y hacer algo de deporte, a ver si libero endorfinas.

Según el médico...

Tras tener varios episodios de pesadillas y parálisis del sueño, y más, fuimos finalmente al neurólogo, mi madre y yo.

Allí verificaron que no estoy loca, que el problema es simplemente que no me duermo en profundidad.

Bravo, a esa conclusión llegué hace mucho tiempo.

¿Las causas de no dormirme en profundidad? Ni idea. Mi madre dice que tomo mucha cafeína, pero lo cierto es que sólo la tomo cuando he tenido tan mala noche que al día siguiente estoy, literalmente, dormida. Mi cuerpo sigue alerta mientras que mi mente comienza a soñar. Por así decirlo, estoy y no estoy dormida. Es una parasomnia debida a que mientras que mi cabeza sueña, mi cuerpo está alerta, por así explicarlo. No creo que sea exactamente así, porque si lo fuera, tendría más episodios de sonambulismo o de hablar en sueños, y la mayoría de las veces es más bien que no me puedo mover.

En fin, me han mandado un relajante muscular (DROGAS PARA DORMIR, BIEN : D ), que todavía no he probado, pero cuando acabe la época de exámenes y trasnochar, probaré.

Lo malo es que me da pena no recordar los sueños, pues si tengo sueños profundos me será mucho más complicado.

Soñar en idiomas

Eran una especie de olimpiadas y teníamos que bailar y cantar. No me preguntéis porqué las olimpiadas eran un musical, es un sueño, no tiene sentido.

Estábamos dos chicas y yo de piernas abiertas en el suelo, la derecha delante y la izquierda atrás (spagat), la espalda muy recta, aguantando malamente la respiración (a mí me costaba más que a ellas) cuando una especie de presentador empezaba a cantar y acababa rapeando. Vestía pantalones blancos y americana azul celeste.

Entonces hacía un giro sobre su pie izquierdo y ponía el micro a la primera chica, que seguía su rap en francés. Yo les entendía malamente. Luego hizo lo mismo y pasó a la segunda chica. Y así hasta que llegó mi turno, yo le decía algo que sonaba así como "ye compré aba ye ne paglé fransé" (El "aba" viene de "aber", en alemán es "pero")  Entonces él me contestaba en alemán "¿Así que tu eres de las que renunciaron en el instituto a francés por alemán?" Yo le iba a responder que no estudié alemán en el instituto, sino por libre, pero me puso el micro en la cara y tuve que seguir la canción en alemán.

Poco después el suelo y el cielo se empezaron a resquebrajar, y el sueño continuó, pero esta es la única parte que recuerdo ordenadamente. Los sueños de esta noche han sido muy intensos.


miércoles, 5 de diciembre de 2012

Despertar con alarma

Estoy tumbada en una tumbona, tomando el sol, ahí, en el portal de mi casa, junto con mi novio, mientras vemos como se marcha mi padre en coche por la cuesta.

De repente suena un estruendo, como si se hubiera chocado con la puerta de fuera. Bajamos para ayudarle.

Y entonces suena Despierto de golpe y corro.

El pitido de la alarma.

MI PADRE HA ACTIVADO LA ALARMA CONMIGO DORMIDA EN CASA.

Nunca me he dado tal carrera, de la cama dormidísima a desactivarla en nada mientras pitaba. Ha sido un susto bastante fuerte, y el corazón, vamos, de 0 a 100 en un momento. Pero al menos no ha sido nada más que un susto.

martes, 4 de diciembre de 2012

Reconciliación de los ancianos

No recuerdo cómo llegaba ahí. Este sueño era de total alienación, yo sólo era un espectador, que lo veía todo como un narrador omnisciente, pero no tomaba parte en la historia.

Todo empezaba con una chica y una niña, bajo la lluvia, que se encontraban con un viejo amigo y se quedaba a vivir con él, quien les dejaba la terraza, inundada ahora, para hacer su vida. La terraza tenía 2 puertas de cristal correderas en donde se estaba caliente, allí extendían sacos y esterillas. La niña miraba la lluvia en la terraza fuera sin mojarse, la chica estaba entre las 2 puertas correderas hablando con quien les había acogido. Le explicó que si no le hubiera encontrado, tampoco hubiera pasado nada, hubiera vuelto a la casa de sus padres, aunque llevaban años sin hablarse.

A su vez, en otro lugar del mundo, un anciano añoraba a sus amigos de la infancia, la mayoría muertos o desaparecidos. Ahora estaba viudo en una casa enorme sin nadie con quien compartirla.

Tanto a la chica que se había quedado sin casa como al anciano con una casa vacía recibían una carta, que, literalmente, llevaba el viento.

Sus destinos se acababan cruzando y la chica vivía con el anciano, para cuidarle.

Le preguntaba sobre su vida, y este le acababa contando su pena y soledad. Ella, comenzaba a hacer averiguaciones y encontraba en una floristería a una mujer, anciana también, que fue la primera novia del anciano.

No voy a narrar todas las investigaciones que tuvo que hacer y todo lo que tuvo que viajar para encontrarla. Al final, les enviaba una carta y hacía que ambos se encontrasen. Al principio les costaba reconocerse, pero luego empezaban a hablar, y pese a los estragos de los años, hallaban a los niños que un día fueron y recuperaban ése espíritu.


Ahora el anciano ya tenía alguien con quien compartir la casa.

El amigo que acogió a la chica y a la niña, tras varias visitas más, le proponía matrimonio. Ella aceptaba. Quería que las familias se conociesen, por lo que organizaban una merienda para anunciar la noticia.

Invitaban a un anciano, amigo de los otros, con el que habían tenido años de odio, pero gracias a la chica habían visto que no tenía sentido guardar rencores y menos aún cuando la muerte  está cerca.

Este tercer anciano, estaba más ido de la olla que el resto, era algo mayor. Decía todo el rato "las grandes mentiras de la historia", como por ejemplo que la guerra fría no eran americano contra rusos, sino rusos contra polacos, y cosas así sin sentido. Cada vez que nombraba cualquier cosa del estilo, nos veíamos envueltos dentro de esa parte de la historia, así que tuvimos (ahora lo narro en primera persona porque lo veía como si yo fuera la chica) que huir de todo aquello que nombraba hasta que conseguimos que se callase.

Una vez iniciado la merienda de manera tranquila y dada la noticia, el primer anciano comenzó un baile que decía que se bailaba en sus tiempo y solo los ancianos lo conocían.

Sorprendentemente, el prometido le siguió el baile, se lo sabía a la perfección.

Los ancianos se asombraban, y decían "sólo conocimos a una persona que lo bailaba así" y nombraban a uno de sus amigos fallecidos.

Al prometido le cambiaba la voz y salía la voz del anciano fallecido, que felicitaba a los otros ancianos por haber arreglado sus diferencias y les contaba todas las cosas que hubiera querido remediar de su vida, que ellos disfrutasen las suyas, que no serían mucho más longevas, y que les esperaban allá arriba con mucha ilusión.

Luego el novio recuperó su voz normal, y no sabía qué había sucedido.

Se casaron. Los ancianos fallecieron poco después, dejando en herencia todo a la parejita y a la niña.

La niña no aparecía mucho en la historia y menos aún hablaba. Creo que era la misma niña que en El Río.

domingo, 2 de diciembre de 2012

La cabaña exorcizada

Otra pesadilla de fin de semana.
Soñé que volvía a una cabaña en el bosque donde había una especie de capilla subterránea. A la muerte de un familiar reciente de un amigo, el espíritu de este familiar no podía abandonar la casa de madera, por lo que unos conocidos estaban en el interior de ésta, en la zona que antes fue una capilla, donde había una imagen de una virgen barroca con la pintura pelada. Yo llegaba, no me acuerdo porqué,le tenía que decir algo a mi amigo, pero no recuerdo el qué.

No sabía lo que estaban haciendo, entré y les hablé, y ellos actuaron como si no me vieran, ya que no me contestaban. Supuse que era porque estaban muy concentrados.

Cuando caí en la cuenta de lo que estaban haciendo (rezaban por el alma atrapada mientras esparcían agua bendita e incienso por todas partes) me dispuse a salir, pero ellos salieron antes que yo y cuando les pedí que me abriesen, efectivamente, no me veían.

Entonces quedé dentro de la cabaña, y aunque la puerta estaba rota y podría caber por los huecos de ésta, no podía salir.

Era entonces, chillaba y la golpeaba, y miraba cómo mis conocidos se alejaban, sumergidos en las oraciones por el reciente muerto que no conseguía pasar de mundo.

La cabaña estaba en una parte baja del bosque, todo estaba cuesta arriba desde ella. Por el hueco de la cabaña veía muchos árboles. Y entonces vi al espíritu que se suponía que no podía abandonar la cabaña. No sé quién era, porque no se parece en nada al pariente que había muerto.

Era morena, de ojos grandes, y tenía la piel blanca con las venas azules marcadas y parecía haber muerto ahogada porque estaba mojada. Me miraba, no sé si con alivio por estar fuera o por odio porque hubiera sido una trampa.

Ella quedó fuera de la cabaña y yo atrapada para siempre. Supongo que yo también estaba muerta, porque si no,  no comprendo porqué no me veían.

En el momento en el que vi a la chica ahogada me desperté de golpe.

Para lo que puede ser una pesadilla, esta es muy leve.

No me desperté con miedo, pero una vez ya despierta y consciente se me empezó a acelerar mucho el corazón y entonces sentí algo parecido a terror...  como si  hubiera reaccionado con efecto retardado.

Por suerte me volví a dormir pronto, aunque con la luz encendida.