Soñé que a mi gata, la cuál guiña constantemente el ojo a causa de su valentía (está tuerta, vaya), se descosía la cicatriz del ojo y dejaba ver su vacío. Al mirar dentro, al principio sólo veía los músculos que sujetan al ojo, cicatrizados, y un agujero por donde se veía el cerebro.
La gata se me acercó y miré el agujero.
Profunda oscuridad.
Empecé a ver somo si viajase por el espacio.
Resultó ser su ojo un poco agujero de gusano y un poco Aleph.
Una experiencia extraña y estremecedora.
Y acabé en otro lado completamente diferente, soleado y seco. Pasé de la penumbra a la luz...
Pero recordar el sueño entero, y escribirlo, me requiere un tiempo del que ahora carezco :(